Las actividades académicas del residente están encaminadas a fortalecer las bases teóricas que le permitan al médico en formación brindar a los pacientes una atención de calidad basándose en el conocimiento generado a través de la investigación bibliográfica y reforzarlo en la experiencia del día a día. Estas actividades se encuentran sistematizadas para una mejor organización. Las podemos dividir en grupos:

• Sesiones académicas.
• Sesiones departamentales.
• Desarrollo de un periodico mural.
• Desarrollo de un vademecum personal.

Las actividades asistenciales están orientadas a la obtención de habilidades técnicas propias de la especialidad. En este tipo de tareas, se pasa del saber al saber hacer e involucra consideraciones éticas y profesionales. En este tipo de actividades el papel del médico adscrito se transforma en el de un asesor y supervisor de las actividades del médicio en formación. La práctica asistencial representa un mayor potencial transformativo, pues están ligadas a la atención directa y personalizada de los pacientes y a la dinámica hospitalaria. Las estrategias educativas de la parte asistencial involucran la valoración preoperatoria, la vigilancia y maniobras transoperatorias, los cuidados postanestesicos y el seguimiento en casos específicos. Esto se combina con el paso de visita, la revisión de casos y expedientes clínicos, la revisión de estudios de laboratorio y gabinete, y la reflexión posterior de los conocimientos generados con cada situación clínica.